NEGRITA LLORÓN
¡Escándalo en la Universidad del Alba en la ciudad de La Serena: Crueldad animal desenfrenada en la carrera de Medicina Veterinaria!
Es hora de enfrentar la horrible verdad que ha salido a la luz:
La Universidad del Alba ha estado perpetrando actos de crueldad inimaginables en su programa de Medicina Veterinaria.
Estudiantes de la carrera y defensores de los derechos de los animales han hecho un descubrimiento impactante: Perros en situación de calle están siendo envenenados y utilizados como meros objetos para clases de anatomía. Lo que resulta aún más inaceptable es que estos actos atroces son llevados a cabo por los propios profesores de la universidad, aquellos que se supone deberían ser los defensores del bienestar animal.
¿Cómo puede ser que los supuestos guardianes de la salud animal estén maltratando a seres inocentes en nombre de la educación?
Llorón y Negrita, dos nombres que hoy nos llenan de tristeza y rabia. Estos perritos eran seres queridos y conocidos por toda la comunidad de la Universidad del Alba. Su dulzura, ternura y cariño eran apreciados por estudiantes y personal de la institución. Eran más que simples perros, eran amigos leales y juguetones, que alegraban los días de quienes los conocían. Sin embargo, esta historia tomó un giro oscuro y desgarrador cuando cayeron en manos de verdaderos asesinos.
Resulta inconcebible y desgarrador pensar en lo que estos animales inocentes tuvieron que enfrentar. Su vida fue arrebatada de manera cruel y despiadada por aquellos que deberían haber sido los defensores de su bienestar y protección. Es inadmisible que en una institución educativa se haya permitido semejante atrocidad.
La Policía de Investigación (PDI) ha confirmado que la carrera de Medicina Veterinaria ha estado empleando animales en situación de calle para realizar estudios clínicos, y actualmente se encuentra llevando a cabo una investigación exhaustiva al respecto. Sin embargo, no podemos quedarnos tranquilos solo con una investigación. Necesitamos acción, necesitamos justicia. El alcalde de la ciudad ha prometido encontrar a los responsables de estos actos inhumanos, pero eso no es suficiente. Se necesita un cambio sistémico para evitar que estas atrocidades se repitan.
Lo que es aún más preocupante es que estas prácticas abominables no son casos aislados. Han estado ocurriendo durante años en la universidad y en otras universidades e instituciones educativas del país, de manera clandestina.
NEGRITA Y LLORÓN
¿Cómo es posible que estas actividades se hayan llevado a cabo en secreto, lejos del conocimiento público?
¿Dónde está la transparencia?
Pero no nos detengamos ahí: Las clínicas veterinarias asociadas, respaldadas por el Colegio de Médicos Veterinarios (COLMEVET), también están implicadas en esta barbarie. Utilizan animales vivos, muertos y en situación de calle para experimentos y clases de anatomía en sus carreras técnicas impartidas por las clínicas.
¿Dónde está la ética?
¿Dónde está la responsabilidad?
Es evidente que existe un encubrimiento sistemático, manteniendo en secreto esta información a espaldas de la comunidad. Y mientras tanto, los perros que en su día eran seres felices y saludables están sufriendo una verdadera tragedia. Es momento de que la comunidad se levante y denuncie cualquier caso de maltrato animal. Debemos asegurarnos de que nuestros animales estén protegidos y bien cuidados, especialmente cuando se encuentren hospitalizadas en clínicas veterinarias. No podemos permitir que estos animales sean utilizados en experimentos sin su consentimiento.
Es de vital importancia que todos tomemos plena conciencia de esta terrible problemática y nos encarguemos de difundir la verdad para que toda la nación se entere de estos actos repugnantes. El uso de animales en situación de calle con fines de experimentación y clases de anatomía es una práctica inhumana y absolutamente inaceptable. Exigimos a las autoridades competentes que tomen medidas contundentes para garantizar la protección y el bienestar de los animales, así como para castigar de manera ejemplar a los responsables de estos actos crueles. Juntos, podemos lograr un auténtico cambio y asegurarnos de que nuestras instituciones educativas y clínicas veterinarias estén libres de abusos. Ningún animal merece ser víctima de la crueldad humana, y es nuestra responsabilidad como sociedad protegerlos y asegurarles una vida digna.
¡Unámonos para acabar con esta injusticia y promover un trato humano hacia todos los animales!
Es imperativo que las Universidades y clínicas veterinarias que imparten la carrera de medicina veterinaria sean sometidas a una regulación y control rigurosos. No podemos permitir que estas instituciones, encabezadas por el Colegio Médico Veterinario de Chile (Colmevet), continúen actuando impunemente sin una supervisión adecuada. Ya es hora de dejar de ignorar las negligencias médicas y las atrocidades que se cometen a espaldas de todos, utilizando animales en experimentos y clases. Es fundamental establecer una regulación estricta para evitar que se siga sacrificando animales en nombre de la educación. No podemos tolerar que las clínicas veterinarias y la carrera de medicina veterinaria se conviertan en refugios sin control, donde el maltrato, el castigo y la muerte sean moneda corriente. Necesitamos cambios urgentes y deben ser implementados de inmediato.
Si los responsables de estas acciones hubieran sido sometidos a una fiscalización exhaustiva y se hubiera respetado la ética y el valor hacia todos los seres vivos, no estaríamos lamentando estas dos muertes. Exigimos justicia porque de lo contrario, estos actos continuarán perpetrándose en la clandestinidad, sin consecuencias.
Si posees información relevante sobre este caso, te instamos a que la denuncies y contribuyas a poner fin a estos actos inaceptables. Es hora de asumir nuestra responsabilidad y asegurarnos de que se haga justicia en nombre de los animales que han sufrido y perdido sus vidas. No podemos permitir que estas atrocidades sigan ocurriendo en silencio.
